La Red de Solidaridad Popular insta al gobierno a asumir su responsabilidad y apoya el impulso ciudadano de solidaridad con las personas refugiadas

Sábado, 5 Septiembre, 2015
Comunicado RSP
La RSP apoya la movilización ciudadana en favor de los procesos de solidaridad con las personas refugiadas, si bien reivindica la exigibilidad de quienes son responsables de provocar los desplazamientos forzados y de asumir las consecuencias de los mismos.
 
Hoy, más de 60 millones de personas viven forzadamente lejos de sus hogares a causa de los conflictos, la violencia generalizada, la violación de los derechos humanos. Causas que responden a políticas neoliberales y capitalistas llevadas a cabo por los gobiernos que ahora regatean en la acogida de las personas que huyen de las consecuencias de sus hazañas.
 
Enfoquemos bien el objetivo. España entró a formar parte de la OTAN, es un actor principal en el mercado armamentístico con grupos armados que ahora reprimen al pueblo y es responsable por acción u omisión de los movimientos forzados de población en países como Siria, Afganistán o Iraq.
 
Las personas que huyen de la persecución tienen derecho internacional a solicitar asilo en otros países.
Los estados a cuyas fronteras llegan las personas que buscan asilo están obligados por acuerdos internacionales que en su día suscribieron a asegurar vías legales de acceso al procedimiento de asilo y, en su caso, brindar protección y acogida digna a estas personas.
 
Los Estados miembro de la Unión Europea, externalizan y blindan sus fronteras elevando vallas e instalando concertinas, provocando que las personas busquen vías cada vez más inseguras para acceder a territorio europeo. Son esas vías las que nos dejan imágenes de muertes en el mar, niños varados en la playa, familias subiendo desesperadamente en trenes y personas confinadas en las fronteras con países no europeos; como si en su huida, dejarán también la condición de ser humano entre los escombros de sus bombas.
 
Hoy, España apenas asume el 1% del total de solicitudes de asilo de toda la Unión Europea. Una cifra ínfima que no responde a la dimensión de la necesidad de protección de las personas refugiadas. Una cifra que avergüenza a quienes en la retina mantenemos la imagen de nuestras abuelas en el exilio. Una cifra que de nuevo, crea una brecha entre las decisiones políticas y el impulso ciudadano por querer dar respuesta a la necesidad actual.
 
La RSP, insta al gobierno a que asuma su responsabilidad en la atención y acogida de las personas en búsqueda de protección internacional, poniendo a disposición los procedimientos, medios y mecanismos que garantizan el acceso al Derecho de Asilo y que facilitan impulsar procesos para devolver a las personas parte de la dignidad que sus políticas internacionales de despojo, violencia y capitalismo atroz han generado en países de Oriente Medio, África y América Latina. Globalicen pues, la respuesta a la situación de emergencia humanitaria que viven los pueblos.
 
La RSP, aplaude y se une a las iniciativas de solidaridad ciudadana ante la inoperancia de un gobierno que está fallando en la respuesta a la dimensión del desplazamiento forzado actual. Este impulso es necesario, bienvenido y digno; pero no puede convertirse en la sustitución de la responsabilidad del Estado ni en una respuesta que caiga en el asistencialismo corto placista que generan las imágenes del dolor humano. El proceso de atención a las personas refugiadas es una cuestión que excede una respuesta habitacional y de cobertura de necesidades básicas, y que requiere del trabajo en red entre organizaciones que asuman de forma integral la respuesta y exigibilidad de derechos que giran en torno a una persona refugiada.
 
La prioridad de la RSP es combatir las injusticias sociales y atender las necesidades más apremiantes de la población, esa es la hoja de ruta que debe marcar el camino no solo de las iniciativas ciudadanas sino también de los gobiernos en sus distintos niveles; pero también apuntar a quien es responsable de estas situaciones para combatir esa injusticia desde un enfoque sostenible, duradero y de restitución de derechos.
 
La RSP sigue apostando por la lucha del día a día de los barrios, de la organización popular y del apoyo a movimientos de solidaridad internacional que conocen y luchan por la dignidad de nuestros pueblos.